Tenía entendido que el amor era un círculo:
un anillo perfecto y quieto sin alfa ni omega.
Pero yo creo que el amor es un cubo
suspendido en el espacio
con movimiento helicoidal y
que no admite descripción ni definición de ningún tipo.
Porque cada cara del cubo
es cambiante y metamórfica,
y no tiene nombre, ni tiene carácter.
© Miren Agur Meabe