SIMONÍA
Compraría magia de la buena, si la hubiese:
"Aleja de mi este cáliz;
pero hágase tu voluntad, no la mía".
Me respondes desde el cielo,
como en la películas, con voz grave,
que ese problema es tan sólo mi problema
y que soy tu hija amada, en quien confías.
© Miren Agur Meabe